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| Santiago Romero O. |
Cuando en Colombia nos referimos o nos hablan de medios de comunicación, automáticamente se nos viene a la cabeza RCN y Caracol. Estos dos medios, constantemente, por no decir siempre, están tergiversando la información que sucede en el territorio nacional, esto influenciado por las conveniencias de los partidos políticos de derecha del país (Conservador y Liberal).
Igualmente, se protege una falsa imagen de las fuerzas militares, con su falso lema de cabecilla “los héroes en Colombia si existen” pero no se muestran las atrocidades que estos cometen, cómo en muchas ocasiones son ellos quienes crean el conflicto y se esconden detrás de un uniforme, como las balas y los golpes son su mayor y única defensa, como para ellos es tan fácil defender ideales inadmisibles e irracionales que solo atentan, quebrantan y vulneran la humanidad de los pueblos.
Por otra parte, en nuestro país, parece que anduviéramos cegados o portando diariamente antojeras, que no nos permiten mirar y analizar la gran multitud de horizontes y posibilidades informativas que nos presentan los medios alternativos de comunicación, donde no se tapuja ni se restringe la información, donde podemos encontrar noticias que nunca vemos en estos medios dirigidos por la oligarquía colombiana.
Además, es imposible no observar en cada una de las emisiones de noticias RCN y Caracol, cómo sus marionetas, que se hacen llamar periodistas, difaman y distorsionan la información a su acomodo, protegiendo los intereses de sus amos, y escondiendo la realidad que sucede en nuestros barrios, localidades, ciudades, y en general, nuestro país.
Cabe resaltar, que las actitudes de estos sujetos, manchan el buen nombre del periodista, quien debe por excelencia, informar a la población, llevar verdades, comunicar; y no dilatar y distorsionar los acontecimientos que están perjudicando a los colombianos. ¿Será miedo o presión lo que los obliga a tomar estas posturas? Recordemos lo acontecido con el gran Jaime Garzón, y no solo él, todos aquellos quienes piensan diferente y se han atrevido a decirlo sin pelos en la lengua, han terminado algunos metros bajo tierra, callados por ese grupo que dice tener el poder del país y que emplea este como le da la gana.
Al parecer, estos medios comerciales nos han involucrado tanto en sus realitys y programas, que las masacres a campesinos e indígenas quedan en un segundo plano, los pésimos índices de educación son reemplazados por una novela de narcos, en las que se incita a la violencia y a revivir esos deplorables momentos de nuestra historia. Nos importa más, cuántas veces Amparo Grisales se “eriza” en su perverso programa “Yo me llamo”, pero el despojo de campesinos de sus tierras, los falsos positivos, los carteles de corrupción, los altos salarios de senadores corruptos y como anteriormente lo pronuncié, los bajos índices de educación, son simplemente cuentillos de fantasía, que como popularmente se dice, entran por un oído y salen por el otro, hacemos caso omiso a estos y mostramos total desinterés ante ellos.
Para añadir, vemos como en las noticias que se presentan, ellos realizan fuertes críticas a países como Venezuela, por ejemplo, y ¿es que acaso en Colombia vivimos a las mil maravillas? ¿tenemos un gobierno justo? ¿nada nos falta? ¿tenemos una total inclusión de la población campesina?, si se va a hablar de ellos, debería ofrecerse una voz de apoyo ante sus problemas, y dejar de juzgarlos como si nosotros tuviéramos algún derecho moral y de causa sobre hechos como los que se están viviendo allí para tomar el papel de jueces.
¿Por qué nos encerramos en estos dos medios? ¿Por qué no leemos medios alternativos de comunicación? ¿Por qué no nos acercamos a espacios como este, para enriquecer nuestra información, para formar y forjar un pensamiento crítico? ¿Por qué constantemente dejamos de lado a las comunidades indígenas y campesinas de nuestro país? ¿Cuál es el motivo? Debemos crear una conciencia en la población sobre un cambio social que se puede conseguir desde estos medios alternativos, desarrollar una capacitación en la ciudadanía para reformar estas penosas situaciones que estremecen diariamente a nuestro país, ponerles sobre la mesa todas estas posibilidades, que ayuden a abrir su mente y a no seguir aprisionados y sujetos a la monotonía de los medios comerciales.
Canal Capital, puede ser una gran opción, este canal nos muestra la otra mirada de los hechos, la postura de quienes están en contra de las barbaridades que cometen los “dirigentes” de nuestro país. Es evidente y tomando una idea general, el descontento de los medios comerciales con Canal Capital, por la forma en que es presentada la información allí, y por las temáticas que se desarrollan, como podemos ver en sus diferentes franjas , por ejemplo, se hace un acercamiento con las comunidades indígenas y campesinas del país, temas y problemáticas que son totalmente ignoradas por RNC y Caracol, dando prevalencia a la farándula, y a la información que es de interés para apoyar y promover a los partidos políticos y sus ideales de derecha.
Para concluir, con este corto artículo, realmente pretendo dejar una invitación abierta para que nos acerquemos y conozcamos un poco de estos medios alternativos, nos informemos y podamos observar y analizar todos los sucesos que se desarrollan a nuestro alrededor con una mirada crítica y abriendo nuevos horizontes a la opinión y al pensamiento .
*Estudiante Licenciatura en Humanidades e Idiomas. Universidad Libre Colombia.
Twitter: @_ElProfesor
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